El jefe de Gobierno porteño recorrió la peatonal de la capital sanjuanina y las localidades de Carpintería y Rawson, junto a un puñado de dirigentes locales. Allí cargó contra el massismo al tildar de «bastante caraduras» a los massistas por considerarse «la renovación, cuando hasta hace poco» eran oficialistas.
«Hasta hace diez minutos, Massa y su gente eran kirchneristas y ahora creen que son el cambio», lanzó el líder del PRO en declaraciones a la prensa local. «Ellos fueron kirchnersistas y yo he tenido que resistir en soledad para hacer la transformación que conseguimos de la Ciudad de Buenos Aires», añadió.
Con respecto al paso del senador y líder del partido Producción y Trabajo, Roberto Basualdo, al partido de Massa, Macri aseguró que «cada uno elige». «Basualdo cree en la continudiad y que el peronismo va a traer la solución del país y yo creo que no. Creo que el peronismo ha gobernado la mayor parte de los últimos 30 años, ha prometido mucho pero ha cumplido muy poco. La argentina necesita otra forma de hacer política», sentenció.
En este sentido, Macri se definió como un «hombre de diálogo» y confesó que si llega al sillón de Rivadavia quiere «convocar a todos los que han participado para dialogar y ponernos de acuerdo en políticas de Estado». Al momento de indicar quién es el enemigo del partido aseguró que «no es el que piense distinto sino que es el narcotráfico, la inseguridad y la inflación».
En su encuentro con la prensa, también se refirió al Túnel de Agua Negra y aseguró que «todo lo que conecta al Pacífico va a traer oportunidades de empleo para la gente».
«Hay que apostar fuerte a conectarnos al pacífico porque la mayor parte de las cosas que puede producir los sanjuaninos la va a comprar los Chinos pero hay que apostar ahí e ir por el lado oeste que es más corto», finalizó.
