El reperfilamiento a nivel global de la multinacional de origen estadounidense, ya comenzó a impactar en el sur de Santa Fe.
La empresa avanzó en el despido de 70 empleados, en su mayor parte personal jerárquico que se desempeñaba en la planta en Villa Gobernador Gálvez, en Punta Alvear y en Puerto General San Martín. También se produjeron cesantías en los centros técnicos de la cerealera, como la Bolsa de Comercio de Rosario.
“Para fortalecer el impacto de Cargill, debemos realinear nuestro talento y recursos para que estén en línea con nuestra estrategia”, afirmó la empresa en un comunicado. “Desafortunadamente, eso significa reducir nuestra fuerza laboral global en aproximadamente un 5%. Esta difícil decisión no se tomó a la ligera. Nos apoyaremos en nuestro valor fundamental de poner a las personas en primer lugar mientras apoyamos a nuestros colegas durante esta transición”, añadió Cargill en el documento.