LA PECERA
Gary Larson, en un viejo dibujo animado, representa a tres peces en una mesa, mirando hacia la pecera de la que acaban de escapar, ya que de alguna manera el agua está ardiendo. Uno le dice a los otros dos: «Bueno, gracias a Dios que todos salimos a tiempo… Claro que ahora estamos igual de jodidos».
La pregunta que debemos hacernos para escapar de la actual situación es ¿debemos cambiar de modelo o cambiar de sistema?
Los actuales modelos económicos, son modelos opuestos, distintos, pero dentro de un mismo sistema económico financiero que tiene al dólar como moneda, al FMI y al mercado como instrumentos de control de la economía haciéndola dependiente, ni independiente, ni libre.
Es lo que podemos llamar la «ideología de la pecera», sólo peces distintos dentro de la misma pecera. En una pecera, los peces pueden nadar hacia la derecha o hacia la izquierda, hacia arriba o hacia abajo, lo que no pueden es salir de ella. Se nade como se nade, en esta pecera el pez grande siempre se come al chico.
El origen de la crisis no es la pesada herencia, ni la casta, ni Cristina Fernández, ni Macri, ni Milei; la crisis es por gobernar con el viejo Sistema Económico-Financiero nacido en Breton Woods, con sus modificaciones del año 1971, ya perimido y en vías de extinción.
Por lo tanto, la solución no la pueden dar ni el modelo «teocrático-anarcocapitalista-sionista», que es una distopía en el sentido de representación ficticia de una sociedad futura de características negativas causantes de la alienación humana, ni el modelo liberal, ni el socialdemócrata, ni el progresista-populista, porque todos son modelos distintos dentro del mismo sistema. Son peces de distintos tamaño y color que nadan en distintas direcciones, pero dentro de la misma pecera y solo intentan «comerse» uno al otro.
El presente aporte solo intenta proponer una alternativa, una salida a la actual crisis monetario-financiera, partiendo de entender cómo llegamos aquí y la naturaleza de los errores que hemos cometido.
La actual crisis es monetario-financiera. ¿Cuál es su origen? Muchas de estas crisis económico-monetarias-financieras son el resultado de las decisiones tomadas por el presidente de Estados Unidos Richard Nixon el 15 de agosto de 1971, ¿sugeridas por la City de Londres?, que condujeron a la abolición completa del Sistema de Breton Woods de 1944 y dieron nacimiento al actual Sistema Monetario Financiero, un sistema dictatorial, endeudador, despiadado, desindustrializador, ajustador, austero y de rescate financiero, negando que los asuntos monetarios y bancarios deben estar subordinados a la intención de aumentar la productividad humana y elevar el nivel de vida de la población. Las políticas bancarias y crediticias deben estar diseñadas para ese fin.
Hoy la mayoría de las discusiones se centran en cuestiones monetarias, revelando que la mayoría de los analistas son miopes o son ignorantes, ven solo un aspecto de la economía: el monetario. Olvidan lo fundamental de las transformaciones en la economía física, el otro aspecto de economía, las transformaciones científico-técnicas, que deben ser impulsadas por nuevo sistema monetario, un sistema de crédito y un sistema de tipo de cambio fijo.
SÍ A UNA MONEDA SOBERANA: EL PESO ARGENTINO
Mientras el viejo sistema de Breton Woods se desintegra, la humanidad camina hacia un nuevo Breton Woods, esta vez de naciones libres y soberanas.
FUNDAMENTOS
En toda praxis socio-económico-política, el cambio, el progreso, es un movimiento hacia cotas cada vez mayores de libertad, justicia, igualdad y solidaridad. El progreso de la humanidad responde a una necesidad de la evolución humana. Para poder cumplir con los objetivos perseguidos por un auténtico progreso, hay que proceder a profundas reformas de la sociedad. Hay que ir, en otras palabras, a un verdadero cambio estructural, a un cambio de sistema. Pero ¿qué ocurrirá si los poderes del orden establecido se oponen -como es de esperar- a tal cambio? La respuesta es clara, simple y objetiva: los ciudadanos están obligados a obedecer solo cuando el ejercicio de la autoridad política se realiza dentro de los límites de un orden moral que posibilita el bien común. Mas, cuando la autoridad pública, oprime a los ciudadanos, éstos no deben rehuir las exigencias objetivas del bien común, les es lícito defender sus derechos y los de sus conciudadanos contra el abuso de la autoridad. El actual sistema no está basado en el bien común, sino en el bien individual. En el actual Sistema Económico Financiero basado en el dólar, la evolución histórica exige la formulación de uno nuevo con una moneda nueva, como lo fue en 1944 el de Breton Woods con el anterior que tenía a la libra esterlina, la moneda del Reino Unido, y que ya había cumplido su ciclo.
INTRODUCCIÓN
“El pensamiento libre proclamo en alta voz, pero muera quien no piensa igual que yo”, vieja frase aún vigente. ¿Está prohibido pensar o crear otro sistema económico? ¿No se puede crear un nuevo sistema como lo hicieron en Breton Woods en 1944 los triunfadores de la 2ª guerra mundial? ¿Si lo intentamos hacer los dioses nos maldecirán? ¿Acaso en el estudio de la economía como ciencia se debe dejar de usar la inteligencia humana? La economía es una ciencia y como toda ciencia se debe repreguntar sobre sus hipótesis. La evolución en el tiempo exige descubrir nuevas ideas, nuevos principios para adaptarlos a las nuevas realidades que acontecen.
Estas preguntas surgen cuando, ante cada anuncio de «un nuevo programa económico», quien lo formula afirma que debe ser aceptado como tal porque es el único. Es una visión estática de la realidad, cuando ésta es dinámica. Daré dos ejemplos recientes que confirman esta equivocada afirmación. Uno es la famosa frase de la era Reagan-Thatcher: TINA, el conocido acrónimo thatcheriano: “There is no alternative, no hay alternativa”, será repetido una y otra vez y respetado por todos los medios masivos de comunicación, hasta que sea entendido como una verdad revelada. No hay alternativa al capitalismo, al mercado, a la globalización, a la desregulación financiera, a los salarios en niveles controlados, a la deslocalización industrial, a la disminución de las protecciones sociales, etc. Esta ideología paralizó el desarrollo económico, provoco perjuicios a muchos, así como ingresos gigantescos a unos pocos.
El otro ejemplo es “El fin de la historia y el último hombre» (The End of History and the Last Man) un libro de Francis Fukuyama de 1992. Fukuyama expone su polémica tesis: la historia, como lucha de ideologías, ha terminado, en un mundo final basado en la democracia liberal que se ha impuesto tras el fin de la Guerra Fría. Los acontecimientos posteriores demostraron su falacia.
ECONOMÍA EN DOS ASPECTOS: UNO CIENTÍFICO Y OTRO POLÍTICO
Uno de los aspectos, el que tiene en cuenta el empleo, la producción, la distribución y el consumo es considerado por la economía como la relación de la sociedad en su conjunto con la naturaleza, se llama economía física ya que entiende en todo lo relacionado con las transformaciones de materia y energía. Es la forma en que los hombres se relacionan con el medio ambiente natural-cósmico, para vivir y progresar. En cuanto ciencia, este aspecto de la economía se independiza del papel moneda, del crédito y de la deuda en el ordenamiento de los flujos de empleo y producción de bienes. La economía física es continuación de la cosmogénesis, biogénesis y antropogénesis, que se toma en serio el hecho de la evolución, que sustituye la cosmovisión estática de un universo fijo por la cosmovisión dinámica de un universo en proceso de autodesarrollo progresivo, el que se da en la historia humana en un cosmos en permanente plus-devenir de seres que se autotranscieden, de menos a más. Por esto es necesario cambiar el sistema, para adaptarlo a la evolución, como el de Breton Woods cambio al anterior, el del Imperio Británico, que tenía a la libra esterlina del Reino Unido como moneda.
La moneda, el crédito y la deuda pertenecen a la otra categoría, la de los procesos políticos, y no a la de procesos económicos en su acepción más estricta. En realidad, la economía sólo existe como actividad de la sociedad de forma tal que los acontecimientos siguen un orden político y así deviene en economía política. Estos dos aspectos principales no deben ser antagónicos, se deben armonizar de forma tal que se complementen y no se excluyan uno a otro.
Así la medición del rendimiento de la economía pertenece al ámbito más restringido de la economía física, ya que las leyes que lo rigen mantienen pleno vigor, sin alteración, aun cuando el caso en consideración cambie de una forma de organización política de la economía a otra diferente.
La cualidad de una forma dada de economía política se determina en la manera en que se armonizan las instituciones políticas con los requisitos propios de la economía física. En otras palabras, nunca deben las instituciones políticas hacer que el funcionamiento de la economía viole las leyes de la economía física. En esto coinciden la enseñanza de la ciencia económica y la moral. El único fin de la economía no es la ganancia ni se puede justificar la usura en los intereses, ya que estas dos políticas perversas llevan irremediablemente a la destrucción económica.
Armonizar la economía física con la economía política es el gran desafío del presente pensando en el futuro, con la única herramienta que el hombre posee, su inteligencia natural, que ahora cuenta con la ayuda de la IA que el hombre mismo ha creado.
Crear un nuevo Sistema Monetario-Financiero es asumir la responsabilidad de hacer libremente lo que debemos, si queremos ser, seguros que los dioses no nos van a maldecir, aunque algunos que se creen dioses si lo harán.
El nuevo Sistema Monetario-Financiero, superador del viejo, deberá ser creado por el conjunto de naciones soberanas existentes, aprovechando las actuales experiencias en el Sur-Este Global, las naciones del continente africano y otras en LA. Los BRICS ampliados son un ejemplo de este camino al futuro.
¿UN NUEVO SISTEMA?
La inmensa mayoría de los líderes occidentales parten de la base de que el ‘statu quo actual es el mejor’. La arquitectura financiera internacional creada en 1944 por Roosevelt, Churchill y Stalin es aceptada, afirman que es la correcta, ya que todo el mundo sabe cómo funciona el sistema. Piensan que es imposible pasar de este sistema basado en los Acuerdos de Breton Woods antes de finalizar la segunda guerra mundial, a otro que lo reemplace. Los tres vencedores Roosevelt, Churchill y Stalin crearon el sistema para dar continuidad a la guerra, el sistema creado no lo fue por un acuerdo entre naciones soberanas. Esas instituciones fueron entre otras el FMI, el Banco Mundial y la OMC, la moneda impuesta fue el dólar en un sistema de cambio fijo para con las otras monedas. El presidente Nixon en 1971 eliminó el respaldo oro al dólar, estableció un sistema de cambio móvil que facilitó el futuro endeudamiento privado y público, las alzas en las tasas de interés y el crecimiento de la usura financiera.
El paradigma del equilibrio financiero liberal monetarista de mercado es su dogma. No les importa que los precios estén manipulados por especuladores, no les importa la volatilidad de las monedas nacionales ni el endeudamiento perpetuo de las naciones. Les parece natural.
NUEVA MONEDA EN UN NUEVO SISTEMA MONETARIO Y FINANCIERO
Vamos con calma, aunque la terminología no esté muy extendida en nuestro país, un ‘think tank’ o tanque de pensamiento, es una institución que se dedica a la producción de ideas, investigaciones y que produce evidencia en determinados temas o campos. Los think tank promueven la reflexión intelectual, fomentan debates y espacios de diálogo para conseguir que la sociedad avance y que los asuntos públicos se gestionen de la mejor manera posible.
ORÍGEN Y DESARROLLO DEL NUEVO SISTEMA MONETARIO
Distintos ‘thing tank’ ya han reflexionado y se han expresado sobre el tema monetario:
La transición hacia un nuevo orden económico mundial comenzó después de la desintegración de la URSS en los 90s. Se había desintegrado la bipolaridad, pero uno asumió un falso triunfo y prolongó su caída. Esta transición está llegando ahora a su fin con la inminente desintegración del sistema económico global basado en el dólar, que había intentado asentar las bases del dominio global de Estados Unidos. El nuevo sistema económico es la próxima etapa inevitable de desarrollo, combina los beneficios de la planificación estratégica centralizada con realización descentralizada, economía de mercado, nuevo Banco Central independiente del sistema de dólar, creación de moneda y crédito productivo, no especulativo, crédito que no endeuda, como es el actual del FMI. El nuevo sistema económico deberá unir a varios estratos de sus sociedades en torno al objetivo de aumentar el bienestar común de una manera sustancialmente más fuerte que las alternativas anglosajona y europea. Esta es la razón principal por la que el actual sistema financiero global centrado en el dólar será reemplazado por uno nuevo, basado en un consenso de los países que se sumen al nuevo orden económico mundial. En la primera fase de la transición, estos países recurrirán al uso de sus monedas nacionales y mecanismos de compensación, respaldados por swaps de divisas bilaterales. En este punto, la formación de precios todavía está impulsada principalmente por los precios en diversas bolsas, denominados en dólares. Esta fase casi ha terminado, después de que las reservas de Rusia en dólares, euros, libras y yenes fueran “congeladas”, es poco probable que algún país soberano continúe acumulando reservas en estas monedas. Su reemplazo inmediato son las monedas nacionales, el oro y otros respaldos. La segunda etapa de la transición implica nuevos mecanismos de fijación de precios que no tengan referencia al dólar. La formación de precios en monedas nacionales implica gastos generales sustanciales; sin embargo, seguirá siendo más atractiva que la fijación de precios en monedas «no ancladas» y traicioneras como dólares, libras, euros y yenes. La única moneda candidata a nivel mundial que queda, el yuan, no ocupará su lugar debido a su inconvertibilidad y al restringido acceso externo a los mercados de capitales chinos. El uso del oro como referencia de precios está limitado por la inconveniencia de su uso para pagos. La tercera y última etapa de la transición al nuevo orden económico implica la creación de una nueva moneda de pago digital fundada a través de un acuerdo internacional basado en principios de transparencia, equidad, buena voluntad y eficiencia. Existen ya modelos de unidad monetaria que se han desarrollado para desempeñar su papel en esta etapa. Una moneda como esta puede ser emitida por un conjunto de reservas de divisas de los países BRICS, al que todos los países interesados podrán unirse. El peso de cada moneda en la canasta podría ser proporcional al PIB de cada país, basado en la paridad del poder adquisitivo, por ejemplo, su participación en el comercio internacional, así como la población y el tamaño del territorio de los países participantes. Además, la canasta podría contener un índice de precios de los principales productos básicos negociados en bolsa: oro y otros metales preciosos, metales industriales clave, hidrocarburos, cereales, azúcar, así como agua y otros recursos naturales. Para brindar respaldo y hacer que la moneda sea más resistente, a su debido tiempo se pueden crear reservas de recursos internacionales relevantes. Esta nueva moneda se utilizará exclusivamente para pagos transfronterizos y se emitirá a los países participantes según una fórmula predefinida. En cambio, los países participantes utilizarían sus monedas nacionales para la creación de crédito, con el fin de financiar inversiones, industrias nacionales y necesidades personales, así como para reservas de riqueza soberana. Los flujos transfronterizos de la cuenta de capital seguirán regidos por las regulaciones monetarias nacionales. La transición al nuevo orden económico mundial probablemente irá acompañada de una negativa sistemática a cumplir con las obligaciones en dólares, euros, libras y yenes. En este sentido, no será diferente del ejemplo dado por los países emisores de estas monedas que consideraron apropiado robar reservas de divisas de Irak, Irán, Venezuela, Afganistán y Rusia por una suma de billones de dólares. Dado que Estados Unidos, Gran Bretaña, la UE y Japón se negaron a cumplir con sus obligaciones y confiscaron la riqueza de otras naciones que estaba en sus monedas, ¿por qué otros países deberían verse obligados a devolverles el dinero y pagar sus préstamos? A esto le debemos agregar los capitales fugados que están depositados en bancos internacionales y paraísos fiscales. En cualquier caso, la participación en el nuevo sistema económico no estará limitada por las obligaciones del antiguo. Los países del Sur y del Este Global pueden ser participantes plenos del nuevo sistema independientemente de sus deudas acumuladas en dólares, euros, libras y yenes. Incluso si incumplieran sus obligaciones en esas monedas, esto no afectaría su calificación crediticia en el nuevo sistema financiero. La nacionalización de la industria extractiva tampoco causaría perturbaciones. Además, si estos países reservaran una parte de sus recursos naturales para respaldar el nuevo sistema económico, su peso respectivo en la canasta de monedas de la nueva unidad monetaria aumentaría en consecuencia, proporcionando a esa nación mayores reservas monetarias y capacidad crediticia. Además, las líneas de swap bilaterales con países socios comerciales les proporcionan financiación adecuada para coinversiones y financiación del comercio. Esto significa que la asociación estratégica entre sus pares y competidores -el máximo anatema para el Imperio liderado por Estados Unidos- sólo puede prosperar si despliegan en cooperación un conjunto completo de medidas, entre las cuales la principal es la profundización del comercio en sus propias monedas, mediante una canasta de monedas y una nueva moneda de reserva que no sea rehén del sistema de Bretón Woods que legitima el capitalismo financiero occidental”. Se formará en el mundo un nuevo sistema monetario y financiero con una nueva moneda soberana en cada país y una mundial en un tratado internacional.
Las sanciones económicas han acelerado drásticamente el cambio estructural en la economía mundial; el mundo avanza rápidamente hacia una nueva estructura económica mundial. El centro de la economía mundial ya se ha trasladado al Sudeste Asiático, se señaló que la introducción de sanciones por parte de Occidente influyó en la pérdida del estatus del dólar como moneda mundial.
Ya no se considera al dólar como una moneda mundial; gran parte del mundo está tratando de alejarse de él. Y en la Unión Económica Euroasiática ya se realiza casi el 90% de los pagos en monedas nacionales. Casi la mitad del comercio con China ha cambiado a monedas nacionales. Estamos a punto de formar un nuevo sistema monetario y financiero con una nueva moneda mundial, que se basará en un tratado internacional, se afirma, añadiendo que los países BRICS deberán iniciar la transición hacia un nuevo sistema monetario y financiero.
Se espera que este año, desde la presidencia los BRICS, no sólo se propongan estas iniciativas fundamentales, sino que también se comience a implementarlas. No se está hablando sólo de una nueva moneda de liquidación global, sino también de un registro de unidades de carbono del BRICS, de la formación de un sistema común de regulación ambiental y climática, de la formación de nuevas plataformas para la cooperación comercial y económica, destinadas a crear una gran asociación.
Los países de todo el mundo están dejando gradualmente de utilizar el dólar. India y China están reduciendo su dependencia del actual sistema económico.
Se debe prestar atención ‘al desarrollo de las nuevas tecnologías en el sistema financiero’ como el sector Fintech, los bancos y prestadores de servicios financieros tanto tradicionales como emergentes vienen adaptándose para generar eficiencias a través de la economía digital. Algunos ejemplos de lo antes mencionado son la tokenización de activos, con la tecnología Blockchain, el uso de APIs para las finanzas abiertas, las Open Banking y Open Finance, el uso de IA, inteligencia artificial, para la automatización de servicios financieros, robo-advisors, las monedas digitales, cryptos, en ecosistemas privados, pero también, desde la esfera pública las CBDC por sus siglas en inglés “Central Bank Digital Currency, Monedas Digitales del Banco Central, que demuestran alternativas ya en curso.
BRICS 2024
El papel de los países BRICS en el sistema monetario y financiero internacional es una tarea específica para este año. En la Declaración de Johannesburgo de 2023, los líderes consagraron la determinación de nuestros países de impulsar las transacciones en monedas nacionales y fortalecer las redes de banca corresponsal para asegurar las transacciones internacionales. Se continuará trabajando en el desarrollo del Acuerdo de Reservas Contingentes, principalmente en lo que respecta al uso de monedas distintas al dólar estadounidense. Creemos que la creación de un sistema de pagos BRICS independiente es un objetivo importante para el futuro, que se basaría en herramientas de última generación como las tecnologías digitales y blockchain. Lo principal es asegurarse de que sea conveniente para los gobiernos, la gente común y las empresas, además de rentable y libre de política.
Un nuevo Sistema Monetario basado en la igualdad de todas las naciones, de todas las 193 naciones del mundo, que pongan fin a los 600 años de colonialismo, en una comunidad internacional donde no deben existir naciones y pueblos dirigidos, ni pueblos y naciones dirigentes. En la cual los pueblos y naciones tienen igualdad de derechos y de deberes, cualesquiera sean las dimensiones de sus límites geográficos, la magnitud de su historia, el número de sus habitantes o su poderío material. No deben existir en la comunidad internacional humana gobiernos, pueblos o naciones explotados, ni gobiernos, pueblos o naciones explotadores.
EL EJEMPLO DE ÁFRICA
Líderes africanos, reunidos en la 37ª Cumbre de la Unión Africana en Adís Abeba, abogan por una reforma urgente del sistema financiero internacional. Proponen la creación de nuevas instituciones financieras continentales para promover el desarrollo económico y la integración regional. El presidente brasileño Lula da Silva cuestiona el papel del FMI y el Banco Mundial, instando a que se conviertan las deudas insostenibles de los países africanos en inversiones para el desarrollo.
Los jefes de Estado y miembros de los gobiernos volvieron a tratar sobre la creación de un sistema financiero continental centrado en los intereses y necesidades de los 54 países africanos.
En la cumbre y en parte de los eventos paralelos, los participantes discutieron propuestas como la creación de al menos tres nuevas instituciones financieras: el BCA, Banco Central Africano; el FMA, Fondo Monetario Africano, el BAI, el Banco Africano de Inversiones, según información del gobierno brasileño.
El propósito de estas instituciones es servir como la columna vertebral del sistema africano, promoviendo la integración monetaria y financiera, impulsando el desarrollo económico en todo el continente y ampliando la participación regional en la economía global.
BRASIL FMI Y BANCO MUNDIAL
El presidente de Brasil también se pronunció sobre el funcionamiento de instituciones financieras internacionales durante su viaje a Etiopía para participar como invitado en la cumbre.
En su discurso hizo referencias directas al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial. «¿Estas instituciones van a servir para financiar el desarrollo de los países pobres o van a seguir existiendo para sofocar a los países pobres?», cuestionó.
También declaró que algunos países africanos tienen deudas insostenibles y propuso convertirlas en inversiones para el desarrollo.
«Ese dinero, en lugar de volver a la institución prestamista, puede dirigirse a la construcción de un ferrocarril, una carretera, una central hidroeléctrica, una planta termoeléctrica, una universidad, una institución de investigación. Es decir, que vaya hacia algo que signifique desarrollo para el continente africano», afirmó.
“Para que los países del BRICS se puedan desarrollar de manera normal, necesitamos pensar sobre la creación de nuestro propio sistema financiero que funcione de manera independiente de la política y que garantice las relaciones comerciales entre nuestros países», se dijo en un canal de TV saudita. El comercio entre los países del BRICS está creciendo, pero «para que este flujo comercial funcione, necesitamos un mecanismo de pago confiable». «Hoy vamos a proponer establecer un sistema de pago de liquidación independiente basado en nuevos principios, ante todo digitales y de cadena de pagos, principios que podrían ser cómodos para los países, poco costosos para realizar pagos y además claros».
OTRO EJEMPLO
Rusia planea ofrecer a los BRICS desarrollar un sistema financiero independiente de la política.
Ya se menciona el establecimiento de «un sistema de pago de liquidación independiente basado en nuevos principios, ante todo los principios digitales y blockchain». Se propondrá a los miembros del BRICS formar una estructura bancaria alternativa para asegurar operaciones comerciales que sean políticamente autónomas, dijo a Bloomberg Saudi Arabia TV al margen de una reunión de ministros de finanzas y gobernadores de bancos centrales de los BRICS en Sao Paulo, Brasil.
«Para que los países BRICS se desarrollen normalmente, debemos pensar en crear nuestros propios sistemas financieros que funcionen independientemente de la política y garantizar las relaciones comerciales entre nuestros países», dijo el ministro.
Según sus palabras, el comercio entre los países BRICS se está expandiendo. «Para que estos flujos comerciales funcionen, necesitamos un mecanismo de pago confiable. Hoy propondremos establecer un sistema de pago de liquidación independiente basado en nuevos principios, ante todo principios digitales y blockchain, principios que podrían ser cómodos para los países, económicos para hacer pagos y claros».
El funcionario recordó que el Ministerio de Finanzas ruso aboga por crear una plataforma digital común para unir monedas digitales de los Bancos Centrales y sistemas nacionales de transmisión de mensajes financieros de los BRICS, lo que permitirá facilitar la comunicación entre los bancos y crear canales independientes de pagos y transmisión de mensajes.
La semana pasada se anunció que los BRICS trabajarán para establecer un sistema de pago independiente basado en monedas digitales y blockchain. Se enfatizó específicamente «herramientas de última generación como tecnologías digitales y blockchain. Lo principal es asegurarse de que sean convenientes para los gobiernos, la gente común y las empresas, además de rentables y libres de política». Aunque no se mencionó explícitamente, ya existe un nuevo sistema alternativo. De momento, se trata de un proyecto muy guardado en forma de un detallado ‘white paper’ que ya ha sido validado académicamente y que además incorpora respuestas a posibles preguntas frecuentes.
Se recibió información sobre el sistema a través de varias reuniones desde el año pasado con un pequeño grupo de expertos en tecnología financiera de clase mundial. El sistema ya le fue presentado. Tal como está, está a punto de recibir la luz verde final del gobierno ruso. Después de superar una serie de pruebas, el sistema en tesis estaría listo para ser presentado a todos los miembros del BRICS antes de la cumbre de Kazán. Todo esto se relaciona con una tarea específica para 2024 que es aumentar el papel de los BRICS en el sistema monetario/financiero internacional.
En la Declaración de Johannesburgo de 2023, los jefes de estado de los BRICS se centraron en aumentar los pagos en monedas nacionales y fortalecer las redes de banca corresponsal. El objetivo era «continuar desarrollando el Acuerdo de Reservas Contingentes, principalmente en lo que respecta al uso de monedas distintas al dólar estadounidense».
Ninguna moneda única en el futuro previsible
Todo lo anterior enmarca la cuestión absolutamente clave que se está discutiendo actualmente dentro de la asociación Rusia-China, y pronto, más profundamente entre los BRICS-10: pagos de liquidación alternativos al dólar estadounidense, aumento del comercio entre «naciones amigas» y controles sobre la fuga de capitales.
Los BRICS no están debatiendo la implementación de una moneda única:
En cuanto a una moneda única, similar a la creada por la Unión Europea, esto difícilmente será posible en el futuro previsible. Si hablamos de formas de compensación de acuerdos mutuos como el EURO, Unidad Monetaria Europea, en una fase temprana del desarrollo de la Unión Europea, en ausencia de un medio de pago real, pero con la oportunidad de utilizar más eficazmente los recursos disponibles de los países en acuerdos mutuos para evitar pérdidas debidas a diferencias en los tipos de cambio, etc., entonces este es precisamente el camino por el que, en mi opinión, deberían avanzar los BRICS. Esto está bajo consideración.
La conclusión clave, es que los BRICS no deberían crear una alianza financiera y monetaria; deberían crear sistemas de pago y liquidación que no dependan del astuto «orden internacional basado en reglas».
Confirmó que «un grupo de expertos, encabezado por los Ministerios de Finanzas y representantes de los bancos centrales de los respectivos países BRICS», está trabajando sin parar en el expediente. Además, se están llevando a cabo consultas en otros formatos, incluso con la participación de representantes del ‘Occidente histórico’.
Lo que pretenden los BRICS en su conjunto: Colectivamente debemos idear un producto que sea, por un lado, bastante ambicioso porque es imposible seguir tolerando los dictados de Occidente en este ámbito, pero al mismo tiempo realista, que no esté fuera de contacto con la realidad.
GUERRAS Y CRISIS ECONÓMICA
La causa de las guerras es primordialmente debida a la crisis de descomposición de todo el sistema financiero transatlántico que está empujando a más guerras a tontas y a locas. Occidente está tratando de arrinconar a otros países en una esquina estratégica, quiere escalar a una guerra que puede llegar a ser nuclear, con el fin de preservar su sistema en bancarrota y evitar el surgimiento de otra alternativa superadora, por ejemplo, la centrada en el BRICS. Evitar la guerra nuclear requiere de un cambio en lo que subyace a la crisis económica, dar lugar a una nueva arquitectura internacional de seguridad y desarrollo, a un nuevo sistema creado por naciones soberanas, no por los vencedores de una guerra.
PECERA MENTAL
En una pecera los peces pueden nadar hacia la derecha o hacia la izquierda, hacia arriba o hacia abajo, lo que no pueden es salir de ella. Se nade como se nade, en una pecera el pez grande siempre se come al chico.
Estamos encerrados en una pecera mental, estamos encerrados dentro del sistema económico-financiero-monetario nacido en los acuerdos de Breton Woods en 1944 al finalizar la 2ª Guerra mundial con las reformas en 1971 de Nixon, basado en el uso del dólar como única moneda, un sistema de cambio móvil y en el FMI como control interno de la economía. ¿Olvidamos que somos una humanidad que evoluciona en el tiempo-espacio, que siempre encuentra nuevas formas de adaptarse a sus nuevas necesidades? Si continuamos apegados a un viejo sistema, a viejas ideas, no evolucionaremos. La evolución cósmica, biológica y antropológica nos señala la dirección del camino a construir, ahora con inteligencia, libertad y amor.
ARGENTINA ANTE ESTE DESAFÍO
En Argentina desde que se fundó el FMI en 1944 en los acuerdos de Breton Woods, existió un período en el cual no formó parte del mismo y no se endeudo, con «este monstruo tan peligroso». Recién en 1956 en plena dictadura militar, la llamada «Revolución Libertadora» argentina por decisión del gobierno militar que había tomado el poder en 1955, se afilio al FMI y solicitó el primer préstamo, no fue una decisión soberana, el Congreso de la Nación no funcionaba, el pueblo no participó, ni avaló la incorporación, solo fue ‘un convidado de piedra’ destinado a cumplir con sus metas, condiciones y a pagarla. A partir de esa fecha comienza la verdadera historia de endeudamiento permanente con el FMI y la introducción del dólar como moneda en la economía. Salvo durante el período 1974-1976 bajo la presidencia de Perón, no se solicitó ningún crédito al FMI, se comenzó a pagar el capital, el presidente encomendó a un grupo economistas elevase una propuesta para pagar la deuda en dos años y desafiliarse del FMI y volver a la «independencia económica» del 47, la muerte del presidente impidió que esto aconteciera, algunos funcionarios de aquella época, aún vivos lo pueden confirmar. En 1976 se produce el sangriento golpe militar, uno de los motivos fue porque nos encontrábamos al borde del default, la deuda total, mitad pública y mitad privada, era de casi 7.000 millones de dólares, en 1983 al entregar el gobierno al presidente electo Alfonsín era de 45.000 millones. Su gobierno sólo enfrentó la barbarie represiva con el juicio a los militares, pero dejó intacto al sistema de endeudamiento que había profundizado Martínez de Hoz, la vigencia del dólar como moneda y al sistema de cambio móvil especulativo, implementado en 1971 por Nixon, lo mismo hicieron todos los gobiernos democráticos que lo sucedieron. Todos los sucesivos gobiernos entregaron el gobierno con más deuda externa de la que recibieron, inclusive cuando fueron reelectos o intentaron serlo.
SER O NO SER
“La nación alcanza su ‘libertad económica’ para quedar, en consecuencia, de hecho y de derecho, con el amplio y pleno poder de darse las formas que exijan la justicia y la economía universal en defensa de la solidaridad humana”.
¿La cuestión es el modelo? No, es el sistema, la cuestión no es el modelo sino el sistema. Los actuales modelos económicos vigentes, son modelos opuestos, distintos, pero dentro de un mismo sistema económico financiero que tiene al dólar como moneda, al FMI y al mercado como instrumentos de control de la economía haciéndola dependiente, ni independiente, ni libre.
Es lo que llamó la ‘ideología de la pecera’, sólo peces distintos dentro de la misma pecera. ¿Cómo salir de la pecera? Siendo libres económicamente, para ser soberanos políticamente y justos socialmente. Retomar el camino de la Independencia Económica, como se declara en su Preámbulo: “Nos, los representantes del pueblo y del gobierno de la República Argentina, reunidos en Congreso Abierto a la voluntad nacional, invocando a la Divina Providencia, declaramos solemnemente a la faz de la tierra la justicia en que fundan su decisión los pueblos y gobiernos de las provincias y territorios argentinos de romper los vínculos dominadores del capitalismo foráneo enclavado en el país y recuperar los derechos y gobierno propio y las fuentes económicas nacionales, la nación alcanza su ‘libertad económica’ para quedar, en consecuencia, de hecho y de derecho, con el amplio y pleno poder de darse las formas que exijan la justicia y la economía universal en defensa de la solidaridad humana. Acta de Tucumán 9 de julio de 1947.
El principio de soberanía financiera de la Nación tiene, especialmente en estos momentos, idéntica dimensión formal que el de la soberanía política y la soberanía tecnológica, son tres las soberanías y no una.
La riqueza de una nación es su capacidad de entregar mercancías cuando, donde y como se necesiten. El crédito financiero de una nación es el cálculo de esa capacidad, el que, expresado en forma convencional, constituye el dinero nacional. La moneda es un medio de cambio, no una mercancía. Así como el objeto económico de la agro-industria es la producción y el objeto económico de la sociedad es el consumo, el objeto del crédito y la moneda es la distribución, esto es, el encuentro social entre la producción y el consumo. Utilizando el dinero con propósitos privados y para especular con él, cuando no para dominar por él, sólo tiene una relación indirecta con las mercancías, dejando por ello de ser una medida social de riqueza. Es imprescindible rescatar a la comunidad de esta realidad artificiosa, volviendo a la esencia natural del dinero y el crédito como medios de cambio, se debe colocar su creación y su destrucción en manos del Estado como órgano político de la comunidad.
El dinero de la Nación debe basarse en el crédito real del mismo, es decir, en la capacidad combinada de la Nación para producir bienes y servicios. Reconociendo el dinero cualquier otro patrón o respaldo que no sea el de la cantidad de riqueza de la comunidad nacional, cesa su función de medio de cambio y nace su desnaturalización como mercancía. El Estado Argentino deberá sustituir las actuales modalidades abstractas e irreales para emitir moneda, reemplazándolas por la existencia calculada de bienes y servicios a los que los medios de cambio traducirán. La forma en que computaran las oscilaciones de la riqueza se llevara a cabo por medio de una Cuenta Nacional que reflejara periódica y regularmente la necesidad de crear o destruir el dinero nacional de conformidad con las fluctuaciones de apreciación o depreciación de esa misma riqueza.
Siendo soberano, el Estado Nacional reserva para sí la función exclusiva e inalienable del control de la emisión del crédito y la moneda. El sistema bancario y financiero está al servicio de la economía nacional y tiene como finalidad el equilibrado crecimiento entre el consumo y la producción.
Emitiendo una moneda nacional, el dinero nacional es el medio natural de cambio en el territorio de la Nación. El respaldo de la moneda está dado por la totalidad de bienes y servicios que constituyen la riqueza nacional.
Al crear una economía social, el Estado garantiza la realización de una economía social en la que el capital está al servicio de la economía y la economía al servicio del bienestar general. La economía se organizará dentro de un orden social conformado por los principios de la justicia social, y tendrá como objetivo la satisfacción de las necesidades del pueblo y la seguridad de la Nación.
El origen de la crisis no es la pesada herencia, ni la casta, es por gobernar aceptando este sistema, con el dólar como moneda y FMI como control, descartando que existe otro que la evolución histórica comienza a crear.
Es necesario crear un nuevo Sistema Monetario Financiero Económico Argentino, ante la crisis del viejo sistema con sus modelos y comenzar a darnos una solución libre y soberana, como lo están haciendo pueblos y naciones del Sur-Este Global, especialmente los BRICS, la OCS, los Países no Alineados, todas las 54 naciones africanas, entre otros.
SOLUCIÓN A LA CRISIS
¿Existe solución a la crisis? Si, existe fuera del sistema actual con sus modelos liberal, liberal anarcocapitalista, socialdemócrata o progresista-populista.
Estamos encerrados en una pecera mental, estamos encerrados dentro del sistema económico-financiero-monetario nacido en los acuerdos de Breton Woods en 1944 al finalizar la 2ª. Guerra mundial con las reformas de 1971, basado en el uso del dólar como única moneda y en el FMI como control interno de la economía. ¿Olvidamos que somos parte de la humanidad en evolución en el tiempo-espacio, que cuando caminamos encontramos cosas nuevas? Estamos apegados a un viejo sistema, a viejas ideas. ¿Entendemos los signos de los tiempos nuevos de la humanidad? ¿Somos conscientes de la evolución histórica de la humanidad?
Es lo que llamó la ‘ideología de la pecera’, peces distintos dentro de la misma pecera. ¿Cómo salir de la pecera? Siendo libres económicamente, para ser soberanos políticamente y justos socialmente. Retomar el camino de la Independencia Económica, como se declara en su Preámbulo: “Nos, los representantes del pueblo y del gobierno de la República Argentina, reunidos en Congreso Abierto a la voluntad nacional, invocando a la Divina Providencia, declaramos solemnemente a la faz de la tierra la justicia en que fundan su decisión los pueblos y gobiernos de las provincias y territorios argentinos de romper los vínculos dominadores del capitalismo foráneo enclavado en el país y recuperar los derechos y gobierno propio y las fuentes económicas nacionales, la nación alcanza su ‘libertad económica’ para quedar, en consecuencia, de hecho y de derecho, con el amplio y pleno poder de darse las formas que exijan la justicia y la economía universal en defensa de la solidaridad humana. Acta de Tucumán 9 de julio de 1947.
Siendo soberanos, el Estado Nacional reserva para sí la función exclusiva e inalienable del control de la emisión del crédito y la moneda. El sistema bancario y financiero está al servicio de la economía nacional y tiene como finalidad el equilibrado crecimiento entre el consumo y la producción.
Emitiendo una moneda nacional, el dinero nacional es el medio natural de cambio en el territorio de la Nación. El respaldo de la moneda está dado por la totalidad de bienes y servicios que constituyen la riqueza nacional.
Al crear una economía social, el Estado garantiza la realización de una economía social en la que el capital está al servicio de la economía y la economía al servicio del bienestar general. La economía se organizará dentro de un orden social conformado por los principios de la justicia social, y tendrá como objetivo la satisfacción de las necesidades del pueblo y la seguridad de la Nación.
Reitero, el origen de la crisis no es la pesada herencia, ni la casta, es por gobernar aceptando este sistema, con el dólar como moneda y FMI como control, descartando que existe otro que la evolución histórica comienza a crear.
Es necesario crear un nuevo Sistema Monetario Financiero Económico Argentino, ante la crisis del viejo sistema con sus dos modelos y comenzar a darnos una solución libre y soberana, como lo están haciendo pueblos y naciones del Sur-Este Global, especialmente los BRICS-10, la OCS, los Países no Alineados, todas las 54 naciones africanas, entre otros.
¿Existe solución a la crisis? Si, existe fuera del sistema y sus distintos modelos, sea el liberal, el anarcocapitalista o el socialdemócrata-populista.
SOLUCIÓN A LA CRISIS: ARMONIZAR LOS DOS ASPECTOS DE LA ECONOMÍA
Consideraciones previas
En el marco del actual sistema monetario-financiero, la propuesta liberal-anarcocapitalista enarbola la bandera del equilibrio fiscal, va contra el gasto público culpándolo del déficit fiscal, se habla de cualquier tipo de gasto, pero ‘no se habla del principal gasto público’ que es el que ‘genera el propio sistema’, el gasto de la deuda pública interna y externa. La principal causa del déficit fiscal es el pago de los servicios, de los intereses de la deuda externa. El principal factor de desequilibrio es el pago de los intereses de la deuda que es un problema fiscal irresoluble. Si el gobierno quiere bajar el gasto público en serio deberá resolver primero el pago de la deuda. Dicen “no hay plata”, pero para el principal gasto público si hay plata, si hay dólares.
La moneda se define por tres funciones, la primera es la de ser unidad de medida del valor de las cosas, la segunda que es un instrumento de cambio, que es lo fundamental, se usa como medio de cambio si el medio de cambio es útil, pero si no es útil, si no sirve de instrumento de intercambio es inflacionaria. Si se tiene un metro patrón elástico, no se puede medir nada. La tercera función de la moneda es ser instrumento de ahorro, instrumento de mantenimiento del valor adquirido como forma de atesoramiento, una forma de mantener el valor de algo que se posee, es un instrumento para atesorar. ¿Necesitamos tener un mismo instrumento para dos funciones diferentes o no? ¿Podemos tener una moneda como instrumento de cambio y otra moneda como atesoramiento o ahorro?, siguen siendo presuntas a responder.
La moneda tiene tres funciones, unidad de valor, instrumento de cambio, y forma de atesoramiento. El problema de la argentina es monetario-financiero y no económico-físico. En Argentina no hay problemas en la economía física, lo que frena la economía real, la que produce bienes y servicios, es una economía monetaria-financiera, es el sistema que lo condiciona y es fundamentalmente el ’cepo de la deuda externa’. El sistema actual es el condicionamiento absoluto de la economía. ¿Cómo, porqué y para qué se endeuda el Estado? El problema más grave es el problema monetario-financiero. ¿Cómo hacemos para que la economía viva frente a una deuda que sigue creciendo y es impagable?
Hay que diferenciar nítidamente entre el capital económico-productivo y el capital financiero-especulativo, uno se transforma en bienes y servicios y el otro el capital financiero, el capital prestable, se presta con interés, con usura que es la palabra legal, para que crezca el capital y no la economía productiva.
El principal problema económico no sólo argentino, sino global, es haber adoptado un sistema monetario especulativo.
El dinero cumple su rol cuando es instrumento para activar la economía física, es decir un instrumento movilizador de la economía física.
SUPERAR LA CRISIS ¿CÓMO?
Para superar la actual crisis monetaria-financiera es imprescindible rescatar a la comunidad de la “pecera” del actual Sistema Monetario Financiero y de Crédito, de esta realidad artificial, esclavizada al dólar, al FMI y al monetarismo sea liberal, anarcocapitalista, socialdemócrata o progresista-populista, volviendo a la esencia natural del dinero y el crédito, según lo establece nuestra Constitución. Es decir, crear las herramientas monetario-financieras propias, que armonicen con la economía real, física, la economía productiva nacional cooperando en una comunidad de naciones soberanas.
NI BIMONETARISMO, NI DOLARIZACIÓN, UNA MONEDA NACIONAL SOBERANA
1.- Emitir una Moneda Nacional: La Constitución Nacional, en el artículo 75 inc. 11establece que: “corresponde al Congreso…hacer sellar moneda, fijar su valor y el de las extranjeras…” El dinero nacional es el medio natural de cambio en el territorio de la Nación. El respaldo de la moneda está dado por la totalidad de bienes y servicios que constituyen la riqueza nacional.
2.- Crear un sistema de Cambio Fijo, semejante al original de Breton Woods, en reemplazo del actual sistema flexible o flotante, exigido por la ideología monetarista y su brazo ejecutor el FMI, estableciendo un Sistema de Cambio Fijo con nación/es respetuosa/s de nuestra soberanía financiera.
3.- Reformular la política de desendeudamiento externo e interno. No es necesario cancelar las deudas, es suficiente por ejemplo extenderlas con bonos a 10 o 50 años, eliminando tasas de interés usurario e investigar su origen, legalidad y quienes fueron los beneficiados desde la incorporación al FMI en 1956.
4.- Crear un Sistema de Crédito soberano para financiar infraestructura, desarrollo productivo, científico-tecnológico y otorgar créditos personales y sociales, por ejemplo, para viviendas y PYMES.
5.- Nacionalizar las Empresas de Servicios Públicos. El gobierno, el estado y las organizaciones sociales deben promover la nacionalización de los servicios públicos, sin que implique su estatización. Antes de la toma de decisiones realizar consultorías nacionales e internacionales.
Una vez establecido el nuevo sistema monetario-financiero definir un plan estratégico económico de corto, mediano y largo plazo para infraestructura, el desarrollo y la innovación tecnológica.
DETENER LA FUGA DE DÓLARES
1) Imponer controles totales de capital y de cambio, así como la conversión obligatoria de todos los ingresos por exportación a pesos para depositarlos en bancos argentinos. Estas medidas pondrán fin a la libre convertibilidad del peso argentino a dólares, a la especulación y la fuga de capitales que promueve.
2) Hasta tanto se crea una moneda soberana, establecer una paridad fija entre el peso y el dólar, determinada soberanamente por el gobierno de Argentina, para las categorías aprobadas del comercio internacional, los viajes y otros usos productivos de las divisas, establecer un sistema de cambio fijo. Este sistema internacional de tipos de cambio flotantes que se inauguró con las medidas anunciadas el 15 de agosto de 1971 por el Presidente Nixon de Estados Unidos, fue el catastrófico punto de inflexión que abrió el paso a la burbuja especulativa actual de 2 mil billones de dólares que no deja de aumentar, que hoy se ha apoderado de todo el sistema financiero transatlántico. El retorno a un sistema de tipos de cambio fijo de las monedas nacionales productivas, no especulativas, está ahora en el orden del día, mucho antes de lo que la mayoría esperaba.
CRÉDITO PRODUCTIVO
3) Emitir fondos públicos de emergencia para los argentinos y para las empresas que de otro modo se verían abocadas a la quiebra. Se deben congelar los pagos al servicio de la enorme deuda interna del gobierno, que en marzo de 2023 sumaban casi $400.000 millones de dólares, hasta que se hayan satisfecho las necesidades urgentes de la población.
4) Nacionalizar el BCRA, Banco Central “autónomo”, que en realidad lo controlan la City de Londres y Wall Street, y restablecer un banco nacional que emita crédito productivo denominado en pesos, a tasas de interés de 1% a 2%.
5) Frenar la inflación galopante mediante el establecimiento de estrictos controles de precios para canastas básicas de bienes esenciales de consumo y de producción. Las elevadas tasas de interés que generan inflación, las devaluaciones impuestas por los banqueros y el «acarreo de fondos» especulativo internacional se deben proscribir y dejarán de ser factores creadores de precios internos desorbitados.
6) Ampliar el comercio en moneda nacional con los miembros del BRICS y otras naciones amigas, aprovechando al máximo la relación de Argentina con los miembros del BRICS y su acceso al NBD, Nuevo Banco de Desarrollo. Esto también ayudará a Argentina a tener acceso a líneas de crédito en monedas distintas al dólar, para fines de inversión productiva, provenientes de esos países y del NBD. Una vez alcanzada estas metas monetario-financieras planificar la economía física, comenzando por grandes proyectos de infraestructura.
HAY QUE SALIR DE LA “PECERA MENTAL”
Si la crisis la originó el viejo Sistema Monetario-Financiero, la solución es crear un Nuevo Sistema, un sistema que lo supere, como lo están haciendo las naciones de la actual mayoría global. Hay que pensar en un SESA, en un nuevo Sistema Económico Social Argentino, libre y soberano comenzando por un nuevo Sistema Monetario-Financiero, por el aspecto monetario de la economía y luego armonizarlo con el aspecto físico de la economía.
Teniendo como guía la sabiduría humanista que aconseja: “Con el fin de favorecer la participación del mayor número de personas en la vida social, es preciso impulsar, alentar la creación de asociaciones e instituciones de libre iniciativa “para fines económicos, sociales, culturales, recreativos, deportivos, profesionales y políticos, tanto dentro de cada una de las naciones como en el plano mundial”. Esta “socialización” expresa igualmente la tendencia natural que impulsa a los seres humanos a asociarse con el fin de alcanzar objetivos que excedan las capacidades individuales. Desarrolla las cualidades de la persona, en particular, su sentido de iniciativa y de responsabilidad. Ayuda a garantizar sus derechos”. Una excelente guía, muy útil en este pasaje de la evolución histórica, dar el salto cualitativo de la participación política electoral a la participación económica-social en una nueva democracia.