Nuevamente se descubre otra estafa, sombrío legado del gobierno kirchnerismo. La actual dirección del PAMI, la obra social de los jubilados, acaba de denunciar que encontraron que desde 2013 estaban pagando medicamentos para afiliados que estaban muertos.
Esto saca a la luz una red de funcionarios, profesionales, farmacias y laboratorios, sin escrúpulos, que truchaban recetas a nombre de afiliados ya fallecidos, se hacían de los medicamentos y los revendían en el mercado negro.
Esta es otra muestra de la corrupción de una gestión que ha simulado ineficiencia como pantalla para poder robar. Es inadmisible que a esta altura nadie controle un padrón de fallecidos en la obra social nacional y estatal de los jubilados. No existe tal ineficiencia, solo la inmoralidad de estafar a los ancianos, enfermos e incluso a los muertos (si cabe tal acción), en fin, a toda la sociedad argentina.
La mafia de los medicamentos no es un mito. Es uno de los focos mas importantes de corrupción del gobierno anterior. Todavía estamos viviendo las terribles consecuencias que han traído para el país; como las derivaciones del triple crimen de General Rodriguez, la conexión con altos funcionarios y la connivencia política y policial.
La nueva administración del PAMI deberá reparar todo esto. Confiamos en una gestión eficiente y responsable que mejore las prestaciones y los servicios.
Instamos a que todo esto se haga público, a que se denuncie y a que se termine de una vez la impunidad y corrupción de la que Argentina ha sido victima.
UCR de Chacabuco
Comité Alem