A unas semanas de haber admitido que defraudó al fisco español en 1,5 millones de euros correspondientes a los períodos 2011 y 2012, el jugador de Barcelona y de la selección argentina arregló con la Fiscalía y la Abogacía del Estado una condena de un año de cárcel y el pago de una multa de 800 mil euros, según informa el diario español El Mundo.
Sin embargo, pese al acuerdo, Javier Mascherano aún deberá ratificar su declaración ante el juez, por lo que no evitaría el juicio en el que se reconocería culpable de los delitos contra la Hacienda Pública de España. El año de prisión sería excarcelable. El jugador ya había admitido los cargos y había pagado 1,7 millones de euros (la cifra evadida más 200 mil euros de intereses).
¿Cómo fue el supuesto fraude? «Según la Fiscalía, el jugador usó dos estrategias: no declarar las rentas obtenidas de la marca que lo viste a través de una sociedad domiciliada en Miami y simular la cesión de sus derechos de imagen a una entidad puramente instrumental radicada en Madeira. El juicio donde se ratificará esta conformidad está previsto que dure unos minutos, tras el reconocimiento del futbolista», cierra el informe de El Mundo.