El hecho se produjo en horas de la mañana de este viernes en Tandil, cuando una persona con la voz de un joven llamó por teléfono a una jubilada, le hizo creer que era su nieto, que estaba a merced de tres delincuentes que habían ingresado a su casa y que le iban a cortar los dedos si no entregaba los dólares que tenía en el lugar.
La víctima, de 88 años, no pudo determinar la veracidad del llamado y cayó en la treta del estafador, aceptando entregar el dinero solicitado.
La jubilada fue a buscar dos bolsas con dinero (aproximadamente unos 8 mil dólares) y los colocó en las ramas de un árbol cercano a su vivienda, como le había solicitado su presunto nieto.
Poco después llegó a la vivienda una hija de la mujer, madre del nieto supuestamente secuestrado, quien le manifiesta que el joven estaba bien y que había salido temprano a trabajar, por lo que la anciana admitió que había sido estafada.
La abuela no pudo ver quien agarraba las bolsas, porque ni bien las dejó en el árbol, se metió en su casa y no se acercó a la ventana a mirar.
En el hecho tomó intervención personal policial de la comisaría Tercera de Tandil y personal del Gabinete de Estafas y Cuentos del Tío de la DDI de Azul, efectivos que intentan determinar con cámaras cercanas si se puede ver a él o los responsables del hecho, a la vez que se inició una casa como “Estafa”, a cargo de la UFI en turno.
Fuente: https://infogei.com/