Río Negro tendrá este invierno su oferta de destinos dividida en cuatro regiones, que son la cordillera, el valle, la estepa y el mar, según lo anunciado hoy durante la presentación de sus propuestas para la temporada, realizada en la Ciudad de Buenos Aires.
El lanzamiento de la temporada invernal, que comenzará el 24 de este mes, se realizó en el hotel Alvear Art y fue encabezada por la ministra de Turismo, Cultura y Deporte provincial, Silvina Arrieta, quien sobre esa división destacó que «por primera vez trabajamos con la misma intensidad en todos los destinos de la provincia».
El gobernador rionegrino, Alberto Weretilneck, le dijo a Télam que «los esfuerzos de promoción se volcaron en las cuatro zonas en las que dividimos la región, y por eso esperamos una buena temporada».
La zona a lo largo de la cordillera de Los Andes, y se caracteriza por sus bosques milenarios, sus lagos glaciares y sus centros de esquí Catedral, Los Baguales, Perito Moreno y Piedras Blancas.
El Cerro Catedral, a 19 kilómetros de Bariloche y a 2.400 metros de altura, es para todo el grupo familiar y en sus 12 pistas y 10 espacios de nieve para recreación hay opciones para esquiadores principiantes y de nivel medio y alto.
El gerente general de Catedral Alta Patagonia, concesionaria del centro, Jorge López Digon, subrayó que «este invierno presentamos novedades en la villa, que ahora tiene 7.000 camas, en las pistas, en la recreación y en los equipos de alquiler, que ahora llegan a los 10 mil».
Los Baguales, a 80 kilómetros al sur de Bariloche, es un centro de montaña invernal para esquiadores avanzados enclavado en la cordillera y sin medios de elevación, por lo cual los ascensos se realizan en vehículos especiales o realizando caminatas por bosques de lengas helados.
Ramiro Calvo, gerente general de la concesión de este centro, sostuvo que «el lugar cuenta con cuatro refugios y las actividades que se desarrollan, como el esquí y el snowboard, tratan de integrar al hombre con la montaña recorriendo caminos naturales y agrestes».
El Parque Invernal Piedras Blancas, enclavado en el cerro Otto, a 4 kilómetros de Bariloche, funciona desde 2009 con cinco pistas a 1.400 metros de altura, destinadas exclusivamente a la práctica del trineo, lo que lo convierte en la opción ideal para el grupo familiar.
«El trineo permite disfrutar de la nieve con mucha seguridad, los showbus brindan la oportunidad de alcanzar vistas panorámicas únicas de todo el Nahuel Huapi, las que también se obtienen desde las aerosillas que llegan a la cumbre», manifestó Gerardo Esteban, gerente general de la concesión del Otto.
Este cerro, con sus actividades recreativas e institucionales y su confitería giratoria, completan las opciones del lugar, donde el punto más fuerte del turismo está dado por los grupos estudiantiles y por los contingentes de jubilados u otras instituciones.
El centro invernal Perito Moreno, a 25 kilómetros de El Bolsón y a 2.200 metros de altura, brinda vistas únicas de los lagos Puelo y Epuyen y de las zonas de el Hoyo, Cholila, el Manso y el Maitén, entre otras.
El presidente de Laderas del Perito Moreno, la concesionaria de ese centro, indicó que «las laderas del cerro están cubiertas por bosques de lengas y ñires, que en invierno se cubren de nieve y brindan un paisaje único».
Los 11 kilómetros esquiables del cerro, distribuidos en nueve pistas, permiten practicar esquí alpino, nórdico, snowboard y trekking de montaña, juegos de nieve, paseos en trineo y caminatas fuera de pista por la nieve con raquetas.
La zona de la estepa rionegrina se caracteriza por su vegetación y por sus paisajes suaves, ondulados y vastos, coronados por mailines, lagunas y arroyos temporarios.
El Tren Patagónico, el Área Nacional Protegida Meseta de Somuncurá, que protege especies de flora y fauna endémicas y una variedad de manantiales, cráteres, cerros y cuevas con pinturas rupestres y un importante patrimonio paleontológico, son las atracciones de esta parte de la provincia.
La zona marítima, donde los balnearios Las Grutas, en San Antonio Oeste, y El Cóndor y la Lobería, en Viedma, son los destinos salientes, propone actividades ligadas al avistaje de aves y también, en forma incipiente pero cada vez con más fuerza, de la ballena franca austral.
La zona del Alto Valle se caracteriza por su producción frutihortícola, el ancho y caudaloso río Negro, sus bodegas que integran la Ruta del Vino rionegrina, su oferta cultural y por las posibilidades que ofrece para la práctica del turismo rural y de aventura.
«Por todas estas propuestas creemos que esta temporada de invierno va a ser un éxito en toda la provincia», afirmó por último la ministra Arrieta.
Fuente: Télam