«No hay más tiempo”. Así se titula un comunicado difundido por las Cámaras de Productores Lecheros de Córdoba (Caprolec), la Mesa de Productores de Leche de Santa Fe (Meprolsafe), la Cámara de Productores Lecheros del Oeste de Buenos Aires (Caprolecoba) y la Asociación Civil de Productores Lecheros, Ordeñadores y Tractoristas de la Cuenca Lechera Central (Apla).
El mismo se sumó a la larga lista de reclamos que se han ido potenciando por la crítica situación que atraviesa el sector tambero y que no ha podido solucionarse siquiera parcialmente por las medidas tomadas por el Gobierno nacional en conjunto con la industria láctea a principios de enero.
Este “dramático escenario”, como lo califican las cámaras sectoriales, podría desembocar en una ola de protestas en todo el país, posibilidad que ya se mencionó en una asamblea tambera realizada la semana pasada en Villa María. Ahora, estas asociaciones alertaron sobre que podrían realizar protestas “emulando el reclamo de los sojeros hace algunos años”.
La carta de los productores asegura que al sector “lo llevaron y lo sumergieron” a una “lenta agonía destructiva” y cuestiona “la brutal incidencia negativa de las últimas medidas económicas, que terminan de arrasar una actividad que ya venía en terapia intensiva, subsistiendo con respirador”.
Aunque no lo mencionan, se refieren fundamentalmente a la quita de retenciones y devaluación que elevó las cotizaciones del maíz, insumo básico para la alimentación de las vacas.
Y los cuestionamientos no finalizan ahí: “Ante este dramático escenario, la inexplicable inacción de las autoridades y elaboradores, nos lleva a declararnos en estado de asamblea permanente y hacer conocer a todos que “No hay más tiempo”.
“Ya presentamos múltiples propuestas para aliviar la situación y hacerla menos trágica. Ya dialogamos con todos los que había que hacerlo con la mejor predisposición. Ya esperamos el tiempo que nos solicitaran y que creímos prudente hacerlo. ¿Qué tenemos como respuesta? Nada. Solo promesas que no cumplen los industriales ni los funcionarios. Solo desesperanza y desánimo. Solo incertidumbre sobre qué hacer de nuestra actividad, de la que dependen miles de familias. Solo mayor quebranto cada día que pasa”, continúa el comunicado.
Por todo ello, es que los productores amenazan con medidas de fuerza de gran impacto y alcance. “Por todo esto, hoy le decimos al sector industrial y a las autoridades nacionales y provinciales: Basta. La paciencia de los Productores se agotó. Por favor entiendan, no hay más tiempo. Si no encontramos respuestas urgentes, y se sigue permitiendo la destrucción lisa y llana del sector de la Producción, saldremos a defendernos y a defender nuestra actividad donde sea necesario, en las rutas, las plazas, las industrias, los Ministerios, las sedes de los Gobiernos. Emulando el reclamo de los sojeros de hace unos años, a los que invitaremos a que nos apoyen”, alertan los productores.
Además, confían en que “la gente nos acompañará en este reclamo, porque esta actividad es de todos, no de unos pocos. Pero muy especialmente, por si alguno no lo sabe, mueve las economías de amplias regiones de nuestras provincias y nuestros pueblos del interior”.
Fuente: Edición Rural