Presentaron al 119º nieto recuperado

La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, presentó este martes en público a Mario Bravo, quien se reencontró con su madre, Sara, lo que definió como un «milagro».

Mario Bravo tiene 38 años y fue separado de su madre al nacer en cautiverio, durante la última dictadura militar. Hace pocos días conoció su identidad tras someterse a estudios de ADN.

«Vi la película de mi vida en blanco y negro. Pensás que te buscaron y que le faltaste a esa familia todos estos años. Lo que pasó es muy malo, muy feo, pero ya pasó. Yo tengo la suerte de haber encontrado a mi mamá con vida, eso es un milagro y tengo que aprovecharlo», relató Mario, al ser consultado sobre cómo fue el reencuentro con su madre, durante una conferencia de prensa en la sede de Abuelas, donde estuvo acompañado por su pareja y su hijo mayor.

Bravo tuvo palabras de aliento para todos aquellos que tienen dudas sobre su identidad, para que se animen a consultar a los organismos de Derechos Humanos y bromeó: «Ahora tengo seis hermanos, sobrinos y muchos gastos para Navidad».

En declaraciones a la prensa tras la conferencia destacó que el primer paso que dio al emprender la búsqueda fue acudir a Abuelas: «Es donde recomiendo que hay que acercarse porque es donde está todo el apoyo. Están estos ángeles que están puestos para dar. Lo que encontré ahí es una cosa impresionante. No hay que tener miedo ni temores. Los tiempos se acortan. Hay que sacarse las dudas sin miedo a nada», enfatizó.

Sobre el esperado reencuentro con su madre biológica, Sara, señaló que fue «muy emotivo».

«(Cuando dio a luz) le pusieron una capucha y no escuchó más nada. Y ahora escucha mi voz y me abraza 38 años después», dijo.

Al respecto, Carlotto, testigo directo del encuentro, resaltó que «fueron larguísimos los minutos de ese abrazo con su mamá».

«Es lo que nos anima a seguir porque ese llanto era de amor. Lo visualicé como la mamá abrazando al bebé. No se podían separar. Era como si él estuviera naciendo en ese momento, porque era como una fusión en ese abrazo», agregó la referente de Abuelas.

Para Carlotto, «estas cosas no pasan de milagro o magia sino porque hay un pueblo que va abriendo un camino que asombra al mundo entero» y dijo que en el contexto actual «se evidencia aún más la necesidad de profundizar las investigaciones», ya que «aún hay desaparecidos en vida», en alusión a los nietos no recuperados.

Consultada acerca del rol que adoptarán las organizaciones de Derechos Humanos a partir del recambio presidencial, garantizó que «en cualquier proceso político» sus «banderas» seguirán siendo «la memoria, la verdad y la justicia, sin ningún tipo de retroceso».

http://www.cadena3.com/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *