El hecho comenzó alrededor de las 14.30, en la sucursal del banco Santander Río de la ciudad, ubicada en 9 de Julio al 100, donde al menos un delincuente ingresó armado un poco antes del cierre de la entidad.
El delincuente pidió el dinero a los cajeros, cometió el asalto y -en circunstancias que aún no se conocen- tomó de rehenes
a los pocos clientes que quedaban dentro de la sucursal y a los empleados del lugar.
Rápidamente se hizo presente personal de la comisaría local mientras espera la llegada de efectivos del Grupo Halcón.
El banco está situado a pocos metros de la plaza central y al frente de la sucursal hay un jardín de infantes que tuvo que ser
evacuado.
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