El día del canillita comenzó a festejarse el 7 de noviembre de 1947, en conmemoración a la fecha de muerte de Florencio Sánchez. Este dramaturgo uruguayo dio origen a esta denominación en su obra «Canillita». En ese libro designa así a un chico de piernas flacas que vendía diarios.
La primera vez que se escuchó el grito de un vendedor de diarios fue en 1867 cuando anunciaba: “¡La República! ¡La República!”. Éste era el nombre de un diario de la época que ideó aquella forma de venta directa. Debido a su éxito, esta costumbre fue adoptada por otros diarios, creándose así una nueva fuente de trabajo.
Cabe recordar que el 7 de Noviembre es no laborable desde el 2007, cuando los trabajadores canillitas decidieron recuperar su día a 15 años de que les fuera arrebatado. Junto con el sindicato, ese 7 de noviembre resolvieron descansar pese a las presiones que recibieron de algunos diarios.
En sintonía con la reivindicación de los trabajadores, el Congreso de la Nación aprobó por unanimidad en noviembre de 2009 La ley Nº 26.540, que recupera ese derecho conculcado en la década del ´90: el Día Nacional del Vendedor de Diarios y Revistas.
