Apple estrena dos nuevos modelos de smartphones

Son los iPhone 5S y 5C. Usan el iOS 7. Estarán disponibles en septiembre en los EE.UU.
Habemus nuevo iPhone desde el martes último. En rigor, Apple mostró ese día dos nuevos smartphones: el 5S y el 5C. El 5S es el nuevo tope de línea; tiene el aspecto de su antecesor; agrega una opción de color oro; mejora la cámara, más sensible a la luz gracias a su sensor de mayor tamaño, y graba video en cámara lenta; suma un procesador A7 de 64 bits, más veloz que el anterior, y un coprocesador para controlar los sensores de movimiento del celular; reduce así el consumo de energía y aumenta la autonomía del teléfono.
Y tiene un sensor biométrico: se podrá desbloquear con sólo tocar el botón de Inicio. Ya hay quejas de organizaciones preocupadas por ese registro de huellas dactilares; según la compañía, esos datos biométricos no salen del teléfono ni están disponibles para los desarrolladores.
El iPhone 5S saldrá a la venta en Estados Unidos el 20 de septiembre, acompañado por el iPhone 5C, que es un iPhone 5 (el de 2012) con una colorida carcasa de plástico, y el mismo hardware. Y el mismo precio que tendría hoy el modelo 2012, que dejará de fabricarse.
Ambos usan iOS7, que para dispositivos anteriores estará listo para descargar el miércoles próximo, y que trae cambios visuales importantes a este sistema operativo.
Antes de su presentación se especulaba con que el iPhone 5C sería un equipo económico, un segmento en el que la compañía no ha tenido el éxito que esperan los accionistas. En rigor, el 5C será más barato de fabricar (y por lo tanto mantendrá los márgenes de ganancias por equipo esperados), pero no tendrá un precio de venta menor. Tim Cook, el CEO de Apple, no parece estar respondiendo a los movimientos del mercado; las acciones de la compañía cayeron de 500 a 470 dólares en los días posteriores al anuncio.
¿Por qué Apple no salió a vender un celular realmente económico? ¿Quedó atrás la época en que sorprendía a todos con sus avances? No lo creo. Apple tiene que ampliar los segmentos de precios que cubre y lo sabe; pero tenía que romper con su oferta tradicional de celulares (presente, último y penúltimo) para lograr una segmentación mayor.
¿Una posibilidad? Que al iPhone S y al C se le sume, el año próximo, un reemplazo para el modelo más económico. Hoy es el 4S; el año que viene no será el 5, porque deja de fabricarse. Pero no será el 5C, sino probablemente una nueva línea (las apuestas van por la letra E).
Apple tendrá, entonces, tres productos bien diferenciados: la S como tope de gama, la C en el centro y un modelo más modesto para la pata barata. Y para cada uno de ellos, el modelo nuevo (el de ese año) y el antiguo, duplicando así su oferta de tres a seis equipos en todo momento.
Esa es la visión positiva del anuncio; la negativa es que Apple no encuentra cómo salir de un camino exitoso, pero cuya huella no lo deja moverse a otros sectores. En poco tiempo sabremos si Tim Cook supo leer correctamente al mercado..
Fuente: La Nación