(Por Matías Fittipaldi) Algunos tal vez lo recuerden como «Gabriel Podliszewski» en los discos de Jóvenes Pordioseros o como «Gabo» en el debut de Hijos del Oeste; otros sabrán que grabó con El Bordo y Callejeros; y los más detallistas lo habrán visto en la última formación de Intoxicados, la que tocó en Mar del Plata y Cosquín antes del adiós. Pero en un momento Guti decidió cambiar de aire y meterse en la cabina.
En el 2006, la vida le llevo a un nuevo camino, el Techno curioso, irónico y creativo, fusionando la música electrónica con su jazz y raíces latinas, Guti se convirtió rápidamente en uno de los productores más ansiosos e interesantes de la escena del tech-house latinoamericana. Él muestra su impresionante set en vivo (live) en los mejores clubes de América y Europa.
Fue en 2007. «Van a decir que soy puto», se jactaba (y se atajaba) por entonces en una entrevista. «Mirando hacia atrás, veo que era una locura», considera ahora, y habla de los tracks que subía a su MySpace y de los billetes de cien dólares que tomó prestados de sus amigos para emprender su primera e improvisada gira europea. «Si es casi imposible tener éxito con una banda de rock, tenerlo como a mí me está pasando en la música electrónica es definitivamente imposible. Lo que hice fue mitad de valiente, mitad de retardado.»
La estrategia de los tracks en MySpace y de las giras a pulmón dieron buenos resultados y Guti fue haciendo amigos: el renombrado productor alemán Loco Dice, uno de los referentes mundiales de la música Techno, es uno de ellos. «Estaba enamorado de «Salsón»; cuando lo escuché, me di cuenta de que eso era lo que yo estaba buscando: house music cool y latina», relata Dice, que antes de escuchar a Guti ya conocía a los argentinos Hernán Cattáneo, Franco Cinelli, Federico Molinari y Damián Schwartz. Luego de algunos mails, se encontró con Guti por primera vez en una fiesta en Miami. Y se volvieron a ver en Detroit, cuando el alemán tocó después de un show de Afrika Bambaataa y pasó cinco tracks de Guti.
La historia de Guti y Loco Dice avanzó rápido, y ahora el tecladista del rock barrial es gran parte del sello tan nombrado de Dice: “Desolat”, uno de los más importantes de la escena tech-house a nivel mundial. Pero si algo es de destacar, es que el argentino nunca dejó de sentir su interés por el Rock y mucho menos por el Jazz, con el cual continúa trabajando a diario musicalmente.
En su primer disco grabó siete temas producidos en diferentes hoteles del mundo, siempre de viaje. Para el título, Loco Dice le dio un consejo: «Buscá algo que tenga que ver con tu forma de sentir la música». Guti no la tenía fácil. Pero un tema de Intoxicados lo iluminó: «Estaba escuchando «Las cosas que no se tocan» con mi hermano y elegí ese título como homenaje. No sé si Pity se enteró. Él me había invitado a sumarme al regreso de Viejas Locas, pero le tuve que decir que no para elegir mi propio proyecto».
Desde hace ya algunos años, Guti se ha convertido en uno de los más importantes productores y djs argentinos en el mundo. Se lo puede ver muy seguido dando shows en clubes de Europa y Alemania, más precisamente. Además de participar en festivales de importante renombre como Creamfields y en muchos otros lugares del país.
Por estos días se lo puede encontrar por la ciudad Buenos Aires, ya que este sábado 16 de Marzo se estará presentando en Moonpark, uno de los festivales más importantes de música electrónica del país, junto a Hernan Cattaneo y Sasha.
Guti en un show con Jovenes Pordioseros
Una de las tantas producciones de Tech House de Guti
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Guti: de estrella de rock nacional, a lo más alto del Tech House mundial
